Más de 2,2 millones de niñas en Afganistán han sido excluidas de la educación durante cuatro años, según Catherine Russell, directora ejecutiva de UNICEF. Desde que se prohibió a las adolescentes asistir a la escuela más allá del sexto grado, la situación ha empeorado con el regreso de más de 2 millones de afganos. Esta prohibición no solo afecta su acceso a la educación, sino que también tiene graves consecuencias para su bienestar mental y social. UNICEF hace un llamado urgente a las autoridades para que levanten esta restricción y permitan que todas las niñas asistan a la escuela, destacando que el futuro del país depende de la participación plena de mujeres y hombres en la sociedad.
Más de 2,2 millones de niñas en Afganistán han sido privadas de educación durante cuatro años
NUEVA YORK, 17 de septiembre de 2025 – Desde hace cuatro años, las adolescentes afganas enfrentan la prohibición de continuar su educación más allá del sexto grado. Se estima que para finales de 2025, más de 2,2 millones de niñas habrán quedado excluidas del sistema educativo.
El reciente retorno de más de 2 millones de afganos desde países vecinos incrementará aún más el número de niñas sin acceso a la educación. Esta situación se agrava tras el devastador terremoto que afectó al país y que resultó en la pérdida de vidas de 1.172 niños y niñas.
Catherine Russell, directora ejecutiva de UNICEF, subraya el papel crucial que desempeñan las trabajadoras sanitarias y sociales en este contexto. Estas mujeres son fundamentales en los esfuerzos humanitarios, especialmente en una sociedad donde la estricta segregación por género limita la capacidad de los hombres para atender a mujeres y familias.
Para mantener estas profesiones vitales y muchas otras, es esencial que las niñas reciban educación. Mientras millones de niños en todo el mundo regresan a las aulas este mes, las niñas afganas continúan siendo privadas de este derecho fundamental, lo que representa una grave injusticia.
Esta prohibición no solo amenaza el presente educativo, sino también el futuro del país. Ninguna nación puede prosperar si deja atrás a la mitad de su población. Para que Afganistán avance, es necesaria la participación plena tanto de mujeres como hombres en la fuerza laboral, promoviendo así el desarrollo económico y respondiendo a las necesidades crecientes del país.
Las niñas afganas están perdiendo mucho más que conocimientos académicos; se les está negando el contacto social y oportunidades para crecer personalmente y forjar su propio futuro.
Russell expresa su preocupación por el impacto del aislamiento en millones de niñas confinadas en sus hogares. UNICEF ha documentado un aumento en problemas de salud mental, matrimonios tempranos y altas tasas de natalidad, situaciones que podrían haberse evitado con acceso a la educación.
UNICEF hace un llamado urgente a las autoridades talibanes para que levanten esta devastadora prohibición y permitan que todas las niñas asistan a la escuela, desde primaria hasta secundaria y educación superior.
| Cifra | Descripción |
|---|---|
| 2,2 millones | Número de niñas privadas de educación |
| 4 años | Años desde que se prohibió la educación a las niñas |
| más de 2 millones | Número de afganos que han retornado a Afganistán |
| 1,172 | Número de niños y niñas fallecidos en el terremoto |
Más de 2,2 millones de niñas en Afganistán han sido privadas de educación durante cuatro años.
A las adolescentes en Afganistán se les prohibió continuar en la escuela más allá del sexto grado hace cuatro años.
La falta de educación priva a las niñas del contacto social, crecimiento personal y oportunidades para forjar su futuro y alcanzar su potencial. También se ha documentado un aumento en problemas de salud mental, matrimonios tempranos y altas tasas de natalidad.
UNICEF hace un llamado urgente a las autoridades para que levanten la prohibición y permitan que todas las niñas en Afganistán asistan a la escuela, desde primaria hasta secundaria y educación superior.