“La educación en valores, desde edades muy tempranas, es clave para erradicar la violencia contra las mujeres y para tener una igualdad efectiva y real”.
“Ante el reto de lograr una sociedad libre de violencia contra las mujeres, todos tenemos una gran responsabilidad. Tenemos la misión de acompañar a las víctimas y de manifestar nuestro más absoluto rechazo a las actitudes violentas”.