En Sudán, recientes bombardeos en la región de Darfur han dejado casi 100 personas heridas, incluyendo mujeres y niños. Los ataques, llevados a cabo por las Fuerzas de Apoyo Rápido y las Fuerzas Armadas Sudanesas, han intensificado la crisis humanitaria en el área. Desde mediados de agosto, más de 650 heridos han llegado a los hospitales que apoyamos, mientras que muchos otros no logran escapar de la violencia extrema. Las condiciones en El Fasher son críticas, con escasez de alimentos y medicinas, lo que agrava aún más la situación para cientos de miles de desplazados internos. Médicos Sin Fronteras hace un llamado urgente para que se respete la protección de la población civil y se garantice el acceso humanitario.
En una serie de ataques devastadores, drones han golpeado múltiples localidades en la región de Darfur, Sudán, dejando un saldo alarmante de 99 heridos, entre los que se incluyen mujeres y niños. Estos incidentes, ocurridos el 10 de septiembre, fueron perpetrados por las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) y las Fuerzas Armadas Sudanesas (SAF), lo que ha generado una crisis humanitaria sin precedentes.
Los centros de salud que apoyamos en el norte, centro y sur de Darfur han recibido a los heridos, aunque lamentablemente cuatro personas fueron declaradas muertas al llegar. Marwan Taher, coordinador general de Médicos Sin Fronteras (MSF) en la región, hizo un llamado urgente a todas las partes involucradas en el conflicto para que respeten a la población civil, protejan al personal médico y garanticen un acceso seguro a la ayuda humanitaria.
La situación es crítica en El Fasher, donde nuestro personal ha atendido a 50 pacientes heridos en Tawila. Desde mediados de agosto, más de 650 personas han llegado al hospital que apoyamos ubicado a 60 kilómetros de esta ciudad sitiada. Sin embargo, muchos supervivientes han reportado haber visto numerosos cadáveres en las carreteras y se han visto obligados a dejar atrás a aquellos que no podrían sobrevivir al viaje.
Sylvain Penicaud, coordinador de proyectos en Tawila, compartió testimonios desgarradores: “Algunos han caminado 60 kilómetros a pie, sangrando por heridas de bala. Son los afortunados que lograron escapar del horror”. La vida en El Fasher ha llegado a ser insoportable debido al asedio constante y los bombardeos por parte de las RSF y sus aliados.
A medida que la guerra se adentra en su tercer año, la población enfrenta una violencia implacable. Los ataques con drones del 10 de septiembre no solo afectaron áreas cercanas al frente; incluso comunidades alejadas sufrieron las consecuencias. Este incremento en la violencia ha dejado a cientos de miles atrapados sin acceso a alimentos ni medicinas.
Un ataque reciente con drones ocurrió cerca del Hospital Universitario de Zalingei, donde nuestro equipo escuchó el impacto. Marwan Taher relató cómo tuvieron que activar su plan para víctimas múltiples ante la llegada masiva de heridos. En Nyala, otro ataque dejó varios muertos y heridos graves, lo que representa el octavo ataque aéreo mortal contra esta ciudad en menos de dos semanas.
Las instalaciones sanitarias están bajo una presión extrema, luchando por atender a un número creciente de pacientes mientras enfrentan escasez crítica de suministros y la amenaza constante de nuevos ataques. La situación se complica aún más tras los recientes bombardeos en Jartum, donde se destruyó una central eléctrica, provocando apagones que afectan gravemente el funcionamiento hospitalario.
Las condiciones son cada vez más precarias para los niños prematuros y gravemente enfermos debido a la falta de electricidad constante. Sin duda, este contexto resalta la urgencia del llamado internacional para poner fin a esta crisis humanitaria en Sudán.
Cifra | Descripción |
---|---|
99 | Personas heridas atendidas en los centros de salud apoyados por MSF |
4 | Personas declaradas muertas al llegar a los centros de salud |
650 | Total de heridos que han llegado al hospital en Tawila desde mediados de agosto |
800,000 | Desplazados internos en Tawila debido al conflicto |
El 10 de septiembre, múltiples ataques con drones perpetrados por las Fuerzas de Apoyo Rápido y las Fuerzas Armadas Sudanesas dejaron casi 100 personas heridas, entre ellas mujeres y niños, que fueron atendidas en los centros de salud apoyados por Médicos Sin Fronteras (MSF).
Un total de 99 heridos llegaron a los centros de salud en el norte, centro y sur de Darfur, y se reportó que cuatro personas fueron declaradas muertas al llegar.
La vida en El Fasher ha sido descrita como insoportable debido al sitio y bombardeo constante por parte de las RSF y sus aliados, dejando a cientos de miles atrapados sin acceso a alimentos, medicinas ni ayuda humanitaria.
Los sobrevivientes han reportado haber visto muchos cadáveres en las carreteras y que han tenido que dejar atrás a enfermos y heridos graves durante su escape.
Las instalaciones sanitarias están bajo una presión extrema debido a la afluencia masiva de pacientes heridos y enfrentan una grave escasez de suministros mientras se ven amenazadas constantemente por nuevos ataques.
Médicos Sin Fronteras instó a todas las partes beligerantes a respetar la población civil, proteger al personal médico y garantizar un acceso seguro a la ayuda humanitaria.