A 80 años de su fundación, la ONU enfrenta la necesidad de adaptarse a un mundo en constante cambio. La presidenta de la Asamblea General, Annalena Baerbock, destacó la importancia de que la organización evolucione para abordar desafíos globales como la paz en regiones conflictivas y el cambio climático. En el marco de la próxima semana de debate de alto nivel, Baerbock invitará a líderes mundiales a colaborar bajo el lema "Mejor juntos", enfatizando que ningún país puede enfrentar solo los problemas transnacionales. La renovación y modernización de la ONU son esenciales para garantizar su relevancia y eficacia en el futuro.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) conmemora este año su octogésimo aniversario, un momento que invita a la reflexión sobre su relevancia en un mundo que ha cambiado drásticamente desde su creación. Annalena Baerbock, presidenta de la Asamblea General, subrayó la necesidad de que la ONU se adapte y evolucione para seguir siendo significativa para los 8,000 millones de personas que habitan el planeta.
En una conferencia de prensa celebrada antes del debate de alto nivel del órgano principal de deliberación mundial, Baerbock enfatizó que los Estados miembros deben unirse para responder a las crisis urgentes por la paz en regiones como Gaza, Sudán, Ucrania y Haití. La presidenta también destacó otros desafíos globales, como el cambio climático y la creciente desigualdad, que requieren una acción colectiva efectiva.
Con estos objetivos en mente, Baerbock delineó varias prioridades para la agenda de esta 80ª sesión:
La próxima semana, alrededor de 150 jefes de Estado y Gobierno, junto con miles de delegados, se reunirán en un cónclave considerado crucial. Durante estos eventos, Baerbock invitará a los líderes a dialogar sobre temas apremiantes, destacando especialmente la Conferencia sobre la solución de dos Estados. Este foro representa una oportunidad vital para abordar urgentemente la necesidad de paz entre los pueblos palestino e israelí.
"El conflicto palestino-israelí no puede resolverse mediante guerras interminables", afirmó Baerbock. Además, instó a los dignatarios a adoptar el lema "Mejor juntos", resaltando que "la ONU es el equipo más grande que puede tener el mundo". Enfatizó que ningún país puede enfrentar solo los desafíos globales sin fronteras que nos afectan a todos.
A lo largo de su intervención, Baerbock también respondió a las críticas hacia las Naciones Unidas, recordando que esta organización va más allá del Consejo de Seguridad y la Asamblea General. Citó como ejemplo el trabajo humanitario realizado en Gaza por parte de la Agencia para los Refugiados Palestinos (UNRWA) y otros organismos asociados con la ONU, aunque reconoció que los recursos son limitados debido al bloqueo existente.
La presidenta de la Asamblea General, Annalena Baerbock, señala que la ONU debe adaptarse a un mundo muy diferente al de hace 80 años para enfrentar grandes desafíos colectivos como la paz en conflictos y el cambio climático.
Las prioridades incluyen avanzar en la iniciativa ONU80 para aumentar la eficacia, guiar la selección del próximo Secretario General y construir sobre el Pacto para el Futuro asegurando su implementación.
Se invita a los líderes mundiales a adoptar el lema "Mejor juntos", enfatizando la importancia del trabajo en equipo para enfrentar desafíos globales.
Destaca la Conferencia para la implementación de la solución de dos Estados, que busca abordar urgentemente el conflicto entre Palestina e Israel.
Baerbock afirma que la ONU es mucho más que el Consejo de Seguridad y la Asamblea General, mencionando su papel en la entrega de ayuda humanitaria en Gaza a través de organismos como UNRWA.