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Identifican a víctima de homicidio en Asturias tras 34 años

Redacción | Martes 11 de noviembre de 2025

La Guardia Civil ha identificado a una joven de 24 años, vecina de Avilés, quien fue víctima de un homicidio en 1991. Su desaparición fue denunciada en 1995, tras haber estado oculta durante más de tres décadas. La investigación se reactivó gracias a nuevas técnicas de análisis de ADN y la colaboración entre cuerpos policiales. Los restos óseos hallados en 1995 fueron finalmente confirmados como pertenecientes a la desaparecida, cerrando así un caso que había permanecido sin resolver por años. Este avance resalta la importancia de las nuevas tecnologías en la resolución de crímenes antiguos.



La Guardia Civil ha logrado identificar a una joven de 24 años, originaria de Avilés, quien fue víctima de un homicidio en 1991. Su desaparición fue denunciada cinco años después, en octubre de 1995, cuando su madre presentó una denuncia tras no tener noticias de ella desde 1990. La madre había estado cuidando de su nieta durante ese tiempo.

Las primeras investigaciones realizadas por los agentes no condujeron a ninguna pista concreta sobre el paradero de la joven, quedando su caso registrado en los archivos policiales de personas desaparecidas. Estos archivos son revisados periódicamente ante la posibilidad de que surjan nuevas pistas o indicios que faciliten la localización de las víctimas.

Desarrollo del caso

En mayo del año pasado, durante una revisión rutinaria y gracias a los avances en métodos de identificación, los investigadores contactaron con la familia para obtener muestras de ADN que pudieran ayudar a identificar algún cadáver sin identificar. En junio, se tomó una nueva muestra a la hija de la desaparecida, dado que la abuela había fallecido.

Paralelamente, los agentes realizaron un análisis exhaustivo del caso que les llevó a descubrir un artículo en un periódico regional sobre el homicidio de una mujer apuñalada y enterrada en cal viva en Barros. Este crimen, conocido como el "crimen de Reyes", tuvo lugar el 6 de enero de 1991 y fue investigado por la Policía Nacional de Langreo. Un sospechoso fue detenido tras confesar el crimen a su pareja durante una discusión.

Investigaciones y hallazgos

El detenido afirmó que recogió a la víctima haciendo autoestop en Oviedo y que un intento de robo por parte de ella derivó en un forcejeo donde él la acuchilló. Después del homicidio, ocultó el cuerpo en el maletero y lo trasladó a Barros, donde decidió enterrarlo junto a su pareja después de comprobar que estaba muerta.

A pesar del deterioro avanzado de los restos encontrados en 1995, se pudo elaborar un retrato robot que fue difundido por los medios. Gracias a esta difusión y al cotejo entre el retrato y fotografías proporcionadas por familiares, se establecieron conexiones entre ambos casos.

La colaboración con los agentes involucrados en el "crimen de Reyes" y la recopilación exhaustiva de documentación existente permitieron localizar los restos óseos en el Departamento de Biología del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses en Madrid. Dado que las técnicas actuales para análisis genético han evolucionado significativamente desde 1995, se realizó un nuevo análisis que confirmó que los restos pertenecían a la persona desaparecida.

Cierre del caso

Finalmente, la Guardia Civil ha conseguido poner nombre y apellidos a la víctima del homicidio y notificar a sus familiares sobre su paradero después de más de 34 años sin respuestas. Este avance subraya cómo las nuevas tecnologías y métodos investigativos son fundamentales para resolver casos que antes parecían imposibles.

La noticia en cifras

Cifra Descripción
24 Años de edad de la joven al momento de su fallecimiento.
1991 Año en que ocurrió el homicidio.
1995 Año en que se denunció la desaparición.
34 Años desde el homicidio hasta la identificación de la víctima (2025 - 1991).

Preguntas sobre la noticia

¿Qué ocurrió con la joven identificada por la Guardia Civil?

La Guardia Civil ha logrado identificar a una joven de 24 años que falleció en un homicidio ocurrido en 1991. Su desaparición fue denunciada cinco años más tarde, en octubre de 1995.

¿Cómo se llevó a cabo la identificación de la víctima?

La identificación se realizó mediante el análisis de ADN y la comparación con los restos óseos hallados en 1995, que pertenecían a la persona desaparecida.

¿Qué información se tenía sobre el homicidio antes de la identificación?

El caso del homicidio, conocido como "crimen de Reyes", involucró a una mujer apuñalada y enterrada en cal viva. La investigación inicial no permitió identificar a la víctima debido al estado de los restos encontrados.

¿Cuál fue el papel de las nuevas tecnologías en este caso?

El avance en las técnicas de análisis de ADN y la colaboración entre diferentes cuerpos policiales fueron clave para esclarecer el caso y permitir la identificación después de más de 34 años.

¿Cómo se comunicó la noticia a los familiares?

Una vez identificada la víctima, la Guardia Civil comunicó a sus familiares su paradero tras un largo proceso de búsqueda.

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