Los datos de ejecución del Estado del mes de julio incluyen la liquidación definitiva del sistema de financiación de las Comunidades Autónomas correspondiente al ejercicio 2017, que afecta tanto a los ingresos del Estado (por las cantidades que se reciben de las Administraciones Territoriales) como a los gastos (por las cuantías que el Estado les debe transferir).
También se ha publicado el déficit consolidado de la Administración Central, Comunidades Autónomas y Seguridad Social del mes de junio, que alcanzó el 2,10% del PIB, excluida la ayuda financiera.
En los siete primeros meses del año el Estado ha registrado un déficit de 13.922 millones, un 20,9% inferior al existente en el mismo periodo de 2018. En términos de PIB equivale al 1,11%, lo que representa un descenso de 0,35 puntos porcentuales respecto a julio de 2018. Esta reducción del déficit público se explica por un incremento de los recursos del 5%, muy superior al incremento de los gastos del 1,4%.
Excluyendo los intereses devengados se registra un superávit primario de 1.051 millones de euros, frente al déficit primario registrado de 2.127 millones en el mismo periodo de 2018.
Los recursos no financieros han ascendido a 114.835 millones, lo que supone un incremento del 5% respecto a 2018.
Los recursos impositivos, que representan el 84,3% el total, ascienden a 96.767 millones, lo que supone un aumento del 3,6% interanual. Destacan el incremento del 11,4% del IRPF hasta los 24.986 millones y del IVA, que crece un 3,5% hasta los 46.042 millones. También del Impuesto sobre Hidrocarburos, que aumenta un 8,4% hasta los 7.125 millones.
Las transferencias corrientes y de capital entre administraciones públicas crecen un 17,5% debido, fundamentalmente, a los mayores ingresos por el Sistema de Financiación de las Comunidades Autónomas de régimen común, especialmente por los saldos a favor del Estado de la Liquidación Definitiva de 2017 respecto de los de la Liquidación de 2016.
Las rentas de la propiedad han aumentado un 16%, debido fundamentalmente a un mayor dividendo a cuenta por parte de Loterías y Apuestas del Estado, cuyo equivalente en 2018 se recibió un mes más tarde.
Hasta julio los empleos no financieros han ascendido a 128.757 millones, registrando un aumento del 1,4% respecto al mismo mes de 2018.
En términos acumulados, los consumos intermedios crecen un 9,5%.
La remuneración de asalariados crece un 6,3%, como consecuencia de la equiparación salarial de la policía y guardia civil con los cuerpos autonómicos (hasta julio 295 millones, sin contrapartida en 2018). También influye el incremento retributivo acordado para 2019 del 2,25% sobre el importe de las retribuciones vigentes en diciembre de 2018.
Las prestaciones sociales distintas de las transferencias sociales en especie aumentan un 11,8%, debido al aumento del gasto en pensiones de clases pasivas en un 6,7%. Por su parte, la aportación a los recursos propios de la UE ha aumentado un 15,1%. Las transferencias, corrientes y de capital pagadas a otras administraciones públicas representan el 57,8% del gasto del Estado, con un volumen de 74.407 millones.
Entre otras partidas que descienden, destacan los intereses devengados que se reducen un 3,2%, hasta los 14.973 millones. El resto de los empleos corrientes desciende un 22,8%, debido principalmente al menor gasto destinado a la cobertura de los costes del sistema eléctrico, desde 2.180 millones en julio de 2018 hasta 1.545 millones en el mismo periodo de 2019.
En el primer semestre de 2019, la necesidad de financiación conjunta de la Administración Central, las Comunidades Autónomas y los Fondos de la Seguridad Social, asciende a 26.330 millones excluida la ayuda financiera. En términos de PIB, esta cifra equivale al 2,10%. Se debe recordar que falta el dato correspondiente a las Corporaciones Locales, que vienen registrando superávit de manera consecutiva en los últimos siete años.
Si se incluye en ambos periodos el saldo neto de la ayuda financiera, el déficit sería de 26.272 millones que representa el 2,09% del PIB.
Hay que tener en cuenta que la comparativa del dato de déficit hasta junio no es homogénea. En concreto, la subida de la remuneración de asalariados y de las pensiones de este ejercicio no tienen su equivalencia en los primeros meses de 2018. El pasado año estos incrementos computaron tras la aprobación de los Presupuestos en julio. Por lo que, en los próximos meses, esta tendencia se irá suavizando como ha ocurrido ya con el dato del déficit del Estado de julio.
La Administración Central ha registrado en los seis primeros meses del año un déficit de 11.587 millones, el 0,92% del PIB, descontada la ayuda financiera.
La Administración regional ha registrado un déficit de 7.938 millones, lo que supone un 0,63% del PIB, frente al 0,60% del mismo periodo del pasado ejercicio.
Los recursos se han incrementado un 5%, destacando el incremento del 8% de los impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio y de las transferencias recibidas de otras administraciones públicas, que crecen un 6,1%, principalmente las relacionadas con el sistema de financiación (aumentan un 4,1%).
Los empleos han registrado un aumento del 5,4%, con un importe acumulado de 88.883 millones (4.588 millones más). Destacan, la remuneración de asalariados, que crece un 7% debido, entre otras causas, a que la subida salarial de 2018 no se llevó a cabo hasta julio 2018 con la entrada en vigor de la Ley de PGE, mientras que en 2019 el incremento salarial es del 2,25% sobre el vigente a finales de 2018.
Por otro lado, los consumos intermedios aumentan el 1,5% y el gasto en transferencias realizadas a otras administraciones públicas se eleva un 10,1%, con un volumen de 7.739 millones, debido fundamentalmente al incremento del 17,5% de las transferencias a las Corporaciones Locales y al aumento del 4,9% de las transferencias efectuadas al Estado por el sistema de financiación, que han pasado de 3.948 millones a 4.143 millones.
Por ultimo destacar la evolución del gasto social, incluyendo prestaciones sociales distintas de las transferencias sociales en especie y transferencias sociales en especie, que aumenta en conjunto un 3,3%, principalmente por el aumento del gasto en conciertos educativos en un 5,1%, del gasto farmacéutico en un 1,8%, y del gasto en conciertos de asistencia sanitaria en un 5,5%.
Los Fondos de la Seguridad Social han obtenido hasta junio un déficit de 6.805 millones, equivalente al 0,54% del PIB. Los recursos han crecido un 7,4%, destacando el fuerte incremento de las cotizaciones del 8,6%. Por su parte los empleos aumentan un 8%, motivado fundamentalmente por las prestaciones sociales que crecen un 7,2%.