La Policía Nacional ha desarticulado un grupo itinerante en Madrid especializado en asaltos a viviendas, deteniendo a once personas que han ingresado en prisión provisional. Se les atribuyen tres robos con violencia, uno de los cuales dejó a dos mujeres heridas. El grupo utilizaba información de antiguas empleadas del hogar para planificar meticulosamente sus delitos, haciéndose pasar por trabajadores de la construcción o repartidores. Durante su último asalto, fueron arrestados "in fraganti" y se recuperaron 48.000 euros, así como herramientas para forzar puertas. La investigación continúa y no se descartan más detenciones.
La Policía Nacional ha llevado a cabo una operación en Madrid que ha resultado en la desarticulación de un grupo itinerante especializado en el asalto a viviendas. En total, se han detenido a once personas, todas ellas actualmente en prisión provisional, por su presunta implicación en al menos tres robos con violencia ocurridos en la Comunidad de Madrid. Los arrestos se produjeron “in fraganti” durante un intento de robo en un domicilio de la capital.
Este grupo delictivo obtenía información sobre sus objetivos a través de antiguas empleadas del hogar y adoptaba la apariencia de trabajadores de la construcción o repartidores para pasar desapercibidos durante la ejecución de los robos. La planificación previa era meticulosa, incluyendo el estudio detallado de las viviendas y sus moradores.
En abril de 2025, gracias a la colaboración internacional y al intercambio de información entre cuerpos policiales, se logró identificar la estructura y las actividades delictivas de esta organización que operaba desde hace meses en España, especialmente en Madrid. Este intercambio incluyó la cooperación con la Policía Nacional del Paraguay, lo que permitió descubrir que el grupo tenía su base de operaciones en esta comunidad autónoma.
La investigación reveló una organización criminal bien estructurada y jerárquica, donde sus miembros utilizaban alias y comunicaban entre ellos mediante el lenguaje guaraní. Además, empleaban dispositivos electrónicos para vigilar las casas objetivo y las rutinas diarias de sus habitantes, lo que les confería una notable eficacia para evadir acciones policiales.
El líder del grupo, conocido como “Loiro”, era responsable de planificar los asaltos. Realizaba vigilancias previas para evaluar medidas de seguridad y vías de escape. Para ello, tomaba fotografías de las viviendas y calculaba el tiempo estimado para la respuesta policial ante un robo.
Los otros miembros del grupo recopilaban información crucial sobre los hogares a asaltar, obtenida a través de antiguas empleadas que conocían los detalles sobre objetos valiosos y las rutinas diarias. Con estos datos, organizaban varios asaltos en un mismo periodo.
Hasta ahora, se les atribuye la realización de tres robos con violencia e intimidación en Pozuelo de Alarcón y Madrid. En uno de estos incidentes, dos mujeres sufrieron lesiones graves durante el asalto. En su último intento delictivo, fueron detenidos in fraganti mientras sustraían 48.000 euros. Durante la operación también se recuperaron herramientas utilizadas para forzar puertas y cerraduras, así como indumentaria diseñada para dificultar su identificación.
Los once individuos arrestados han sido ingresados en prisión provisional mientras continúa la investigación abierta por parte de las autoridades competentes. No se descartan nuevas detenciones relacionadas con este caso.
Cifra | Descripción |
---|---|
11 | Número de detenidos |
3 | Número de robos imputados |
48,000 | Cantidad de dinero recuperado en el último asalto |
2 | Número de mujeres lesionadas durante un asalto |
La Policía Nacional ha desarticulado un grupo itinerante especializado en asaltar viviendas en Madrid.
Se han detenido a once personas, todas ellas han ingresado en prisión provisional.
A los detenidos se les atribuyen tres robos cometidos con violencia en la Comunidad de Madrid.
El grupo obtenía información sobre sus objetivos a través de antiguas empleadas del hogar que conocían las rutinas y la existencia de objetos de valor en las viviendas.
Realizaban una rigurosa planificación previa, incluyendo vigilancias y reportajes fotográficos de las viviendas, así como estimaciones del tiempo de respuesta policial.
En su último asalto, fueron detenidos in fraganti y se recuperaron 48.000 euros que habían sustraído.
Se intervinieron útiles y herramientas para el forzamiento de puertas, como patas de cabra y ganzúas, así como indumentaria para dificultar su identificación.
La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.